Este mes la mandarina ha brillado en todas nuestras cajas semanales. Su sabor dulce, jugoso y ligeramente ácido la convierte en una fruta irresistible para comer al natural… pero también es una materia prima increíble para cocina, y se merece algo más que terminar en un cuenco.
Por eso te traemos tres ideas de recetas fáciles con mandarina, para convertir esta fruta tan deliciosa en algo más que un snack: un bizcocho jugoso, un plato salado sorprendente… ¡e incluso chocolate!🍫🤩
Cómo aprovechar todas las partes de la mandarina
La mandarina no solo es deliciosa, sino que tiene beneficios nutricionales importantes. Innovar con la mandarina no es solo cuestión de creatividad: es una manera de aprovechar al máximo sus vitaminas, fibra y antioxidantes. ¿Cómo?
-
Cáscara: perfecta para repostería, marinados, aderezos, infusiones, aceite aromático o ambientador casero. ¡Lávala bien la piel antes de usarla!
-
Pulpa: para comer fresca, exprimir en zumo, añadir a ensaladas o integrar en postres.
-
Abledo (capa blanca): rico en fibra, flavonoides y pectina, contiene hasta 20 veces más compuestos fenólicos que la pulpa.
Incorporar mandarina en tus recetas ayuda a aprovechar la fibra para la digestión, antioxidantes para el sistema inmune y pectina para regular el colesterol.
3 recetas fáciles con mandarina
Limitarse a pelar la mandarina es desperdiciar su potencial. Aquí van tres ideas creativas:
1. Bizcocho de mandarina
Un postre elegante y aromático que transforma una fruta simple en algo especial.

Ingredientes:
- Zumo de 2–3 mandarinas maduras
- Ralladura de la piel de una o dos mandarinas
- Harina (integral o normal, según prefieras)
- Azúcar
- Un poquito de sal
- Huevos
- Mantequilla o aceite de oliva
- Levadura química
Preparación:
- Precalienta el horno a 180 °C y prepara un molde (engrasado o con papel de horno).
- Bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla blanquee.
- Añade la mantequilla derretida (o el aceite), el zumo de mandarina y la ralladura. Mezcla bien.
- Tamiza la harina con la levadura y la pizca de sal e intégrala poco a poco a la mezcla.
- Vierte la masa en el molde y hornea durante 35–45 minutos, dependiendo del tamaño del molde.
- Deja enfriar antes de desmoldar.
✨Toque final: Puedes servirlo con un buen frosting de naranja, limón o mandarina para darle un extra de jugosidad y sabor.
2. Chocolate de mandarina
Una de las combinaciones más sofisticadas: el chocolate y la mandarina se complementan con una armonía perfecta.

Ingredientes:
- 100 gr de chocolate negro
- 1 cucharada de aceite de coco
- 3 mandarinas
- Pistachos
Preparación:
- Pela las mandarinas y separa los gajos quitándoles las partes blancas que puedan tener.
- Funde el chocolate con el aceite de coco.
- Añade el chocolate a los gajos de mandarina e integra bien.
En un papel de horno, coloca los gajos impregnados en chocolate tan juntos como puedas y dándole forma de rectángulo.
- Cuando hayas colocado todos los gajos, pica unos pistachos salados y espolvoréalos por encima. Ralla también un poco de naranja y lleva a enfriar a la nevera mínimo 30 min.
3. Berenjenas con yogur y mandarina
Una receta salada con un toque fresco y cítrico que sorprenderá en cualquier mesa.

Ingredientes:
- 3 berenjenas
- 1 yogur
- 1 mandarina
- Aceite de oliva y sal
- 8/10 hojas de menta
Preparación:
- Corta las berenjenas por la mitad y llévalas al horno con aceite y sal por encima unos 20 minutos a 180º.
- Mientras se hornean las berenjenas, pon el yogur en un bol, con el zumo de 2 gajos de mandarina y mezcla.
- Retira las berenjenas del horno y esparce la salsa de yogur por encima de cada berenjena. Acaba de emplatar con 2 o 3 gajos de mandarina encima de cada berenjena, un poco de menta para decorar y ¡a disfrutar!
No más mandarinas “de toda la vida”. Con estas tres recetas puedes convertir cada mandarina de tu caja en un ingrediente versátil, elegante y lleno de matices.. ¿Te animas a probarlas? Comparte con nosotros qué receta te ha gustado más (o cuál te ha salido mejor😏)