Se acerca la Navidad y con ella, las celebraciones, las comidas largas, los tupper de sobras (¿otra vez?)… y ese momento en el que uno se pregunta: “¿qué hago con toda esta comida?”.

Así que hoy compartimos ideas prácticas de cocina de aprovechamiento con productos de temporada para que esta época no solo sea sabrosa, sino que también pueda ser sostenible.

4 ideas prácticas de cocina de aprovechamiento

1. El caldo: tu mejor amigo (y el del congelador)

Todos lo sabemos: no hay nada como el caldo casero. Es el mejor lugar para cocinar esos trozos de verduras que de normal tirarías a la basura. Si tienes puerro, coliflor, y algún trocito de zanahoria, tienes un caldo para chuparse los dedos (o la cuchara, mejor dicho). Además, será mucho mejor que ese sobrecito que viene con 87 aditivos 😌

💡Si no tienes suficiente para un caldo completo, puedes guardar los trozos en una bolsita en el congelador para ir "acumulando material". Como idea, puedes guardar: las hojas de la verdura, las puntas de zanahoria, los trozos de cebolla...

👉 Haz un caldo casero con las sobras de las verduras:

• En una olla con agua, añade una pizca de sal, pimienta y hierbas si quieres.

• Añade tus "sobras" y hierve a fuego medio–bajo por 30-40 minutos.

Este caldo puede ser base para:

• Sopas de invierno

• Guisos con patata 

• Risottos o cuscús navideños

2. Cáscaras, tallos y hojas: los ingredientes secretos de un buen chef

En TALKUAL sabemos que la belleza está en el interior... ¡y también en los "descartes"! Esas partes que automáticamente tiramos no son basura; son sabor y nutrición extra esperando ser usadas.

• Tallos de coliflor, nabo y col: Son perfectos para un puré espeso y reconfortante. Cocínalos junto a las cabezas, y si quieres un plus de sabor, rostízalos antes de triturar. También puedes picarlos muy finos y añadirlos a salteados junto con la cebolla para un revuelto de aprovechamiento.

• Hojas de zanahoria y puerro: ¡No las tires! Las hojas del puerro son fantásticas para el caldo, y las de la zanahoria (si están frescas) se pueden usar para hacer un pesto original sustituyendo una parte de la albahaca.

• Cáscaras de boniato y patata: Lávalas muy bien. Píntalas con un poco de aceite y pimentón, y al horno hasta que estén crujientes. Tienes unos chips rústicos y nutritivos para mojar en salsa de yogur o en un guacamole exprés hecho con aguacate.

3. El pan duro se reinventa

Ese trozo de pan que quedó olvidado y parece una piedra... simplemente ha adquirido la textura perfecta para su siguiente misión culinaria y un aliado en la cocina de aprovechamiento 😎

👉 Dos ideas rápidas:

• Picatostes caseros con hierbas: Corta el pan en dados, mézclalo con aceite de oliva, un poco de ajo picado, y, si tienes, las hojas de las espinacas que te sobren. Hornéalo 10-12 minutos. Son el crunchy que necesita cualquier crema de invierno o una ensalada simple.

• Torrijas con un toque cítrico: un postre típico que se transforma en un postre navideño y cocina de aprovechamiento sublime. El secreto es infusionar bien la leche con un poco de piel de naranja o mandarina (bien lavada) y canela. Al mojar el pan, absorberá todo ese aroma. ¡Un sabor que sabe a celebración!

4. Fruta madura: el azúcar se concentra en lo imperfecto

La fruta que ha alcanzado su punto máximo de madurez es, a menudo, la más dulce y la que más aroma desprende.

• Compotas y coulis rápidos: Las manzanas o peras con motitas marrones son la base ideal para una compota. Pelas, cortas, una pizca de agua y al fuego bajo. Si le añades una piel de mandarina y un trocito de jengibre, potencias el sabor sin añadir azúcar. Es el topping perfecto para yogures o para acompañar.

• Postres de “rescate” creativo:  El plátano muy maduro es la clave para la humedad en cualquier bizcocho, muffin o pan de plátano (banana bread para los bilingües). Los kiwis que estén blanditos se trituran con un chorrito de zumo de naranja y tienes un coulis brillante para postres.

• Batido inmunológico y anti-desperdicio: Mezcla plátano o mango muy maduro, un puñado de espinacas, un trozo de calabaza cocida sobrante y tu leche favorita. ¡Un chute de energía delicioso!

Menú navideño de aprovechamiento para estas fiestas

Ahora que conoces cómo aprovechar bien los alimentos, vamos a ver cómo estas ideas pueden transformarse en un menú navideño original.

Las Navidades son la excusa perfecta para lucirnos sin complicarnos la vida...No hace falta que todo sea una receta nueva: a veces, la mejor magia está en mezclar bien lo que ya tenías. Son platos sencillos que parecen “pensados” para estas fechas, aunque no hace falta tener una estrella michelin y además sin estrés ni desperdicio.

1.🦐 Entrante frío

¡Olvídate del cóctel de gambas clásico!

- Aguacate con cítricos: Usa los aguacates que estén muy maduros (¡el punto perfecto para cremas!). Tritúralos para hacer una base cremosa y añade un chorrito de naranja.

- Cóctel de pescado: Pica la col lombarda y las zanahorias en juliana muy fina. Úsalas como cama crujiente para el marisco o pescado que elijas. La col lombarda le da color y un aire sofisticado a cualquier plato.

2. 🐟 Plato principal

- Un acompañamiento cremoso: olvídate del puré soso. Haz un puré de boniato y coliflor al curry suave. El boniato le da ese dulzor navideño, y la coliflor (usa también los tallos) le aporta la cremosidad sin necesidad de tanta nata.

- Una salsa cítrica y jugosa: cocina a fuego lento la piel de las mandarinas junto con vino y un poco del jugo del asado. Cuélalo y tendrás una salsa agridulce con un aroma increíble para la carne. Si usas pescado, puedes hacer una vinagreta festiva con el zumo de la naranja y cebolla pochada.

3. 🥗 Guarnición complementaria

Para aligerar la mesa y aprovechar hasta la última hoja: 
- Hojas y Raíces: Saltea las espinacas con unas pasas y piñones (si tienes). Ralla un poco del nabo crudo para darle un punto picante.

- Chutney exprés: Si te quedan trozos de manzana o pera con algún golpe, cocínalos con especias y un poquito de vinagre. ¡Es un chutney exprés que queda de lujo con el asado!

4. 🍰 Postre:

- Tarta rústica o Galette: corta manzana, plátano muy maduro, y los trozos blandos de kiwi o mango. Mézclalos con canela, y simplemente envuelve el relleno en masa de hojaldre de forma irregular. Queda preciosa, sabe a gloria, y le da la salida perfecta a la fruta más necesitada de la semana.

Con estas ideas, convertir las sobras en platos deliciosos deja de ser un reto y se convierte en un juego creativo. Cocina de aprovechamiento no solo cuida tu bolsillo y el planeta, sino que también le da un toque original y sabroso a tus fiestas. Así que estas Navidades, pide tu caja TALKUAL y aprovecha, experimenta y, sobre todo, ¡disfruta de cada bocado!

¡Felices fiestas! 🥕✨