CÓMO COCINAR LOS CALÇOTS

Los calçots son una especie de cebolla que se cultiva y se disfruta de manera especial en Cataluña, España. ¿Qué los hace tan especiales? Son como una mezcla entre una cebolla y un puerro, pero con un sabor más suave y dulce que te va a dejar queriendo más. Ah, y la forma de comerlos es toda una experiencia. ¿Quieres probarlos? Puedes pedir una caja de nuestros calçots aquí. 

Cómo se cultivan los calçots

Los calçots se plantan como cebollas normales, pero luego se cubren con tierra a medida que crecen, lo que les da ese aspecto alargado y blanco en la base. Es un proceso interesante que da como resultado este manjar.

Cómo se cocinan o preparan los calçots

La mejor manera de disfrutar los calçots es asándolos a la parrilla o a la brasa. Los pones sobre el fuego caliente y los dejas allí hasta que la parte de afuera esté un poco quemadita. Sí, es todo un arte para que no se quemen demasiado, pero vale la pena el esfuerzo.

Cómo se comen los calçots

Ponte un babero, que viene la diversión. Después de asarlos, los envuelves en papel de periódico para que se mantengan calientes y terminen de cocinarse en su propio vapor. Luego, con las manos, quitas la capa quemada para revelar el interior suave y delicioso. Y aquí viene lo mejor: los mojas en una salsa llamada "salsa romesco", que está hecha con tomates, almendras, avellanas, pimientos, ajo, aceite de oliva y vinagre. ¡Es una explosión de sabores en cada bocado!

Cuándo es la temporada de calçots

Todo depende del tiempo que haga cada año, su temporada coincide con el final del frío. Es difícil poner una fecha concreta, pero aproximadamente, desde finales de enero y hasta abril.

Receta de calçots al horno

Ingredientes:

• Calçots (entre 10-20 unidades por persona)
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal gruesa

Pasos a seguir:

1. Preparación de los calçots:
   1. Lava bien los calçots bajo agua corriente para eliminar cualquier suciedad o residuo.
   2. Corta las raíces y la parte superior verde de los calçots, dejando solo la parte blanca y el bulbo.
   3. Colócalos en un recipiente grande con agua para que se remojen durante al menos 1 hora. Esto ayuda a que las capas exteriores se ablanden y sea más fácil pelarlos después de cocinarlos.
2. Precalentar el horno:
   1. Precalienta el horno a una temperatura alta, alrededor de 200-220°C.
3. Asar los calçots:
   1. Escurre los calçots y sécalos ligeramente con papel de cocina.
   2. Coloca los calçots en una bandeja para hornear, asegurándote de que estén bien distribuidos y tengan espacio entre ellos.
   3. Rocía generosamente los calçots con aceite de oliva virgen extra y espolvorea un poco de sal gruesa por encima.
   4. Hornea los calçots en el horno precalentado durante unos 20-30 minutos, o hasta que estén tiernos y caramelizados por fuera.
   5. ¡Ya los puedes servir en una bandeja y listo!

En resumen, los calçots son más que solo cebollas. Son una tradición culinaria arraigada en la cultura catalana y una experiencia que debes probar al menos una vez en la vida haciendo una calçotada con amigos o familiares. Así que la próxima vez que tengas la oportunidad de reunirte con amigos alrededor de una parrilla, no dudes en llevar algunos calçots y disfrutar de esta delicia juntos. ¡Que aproveche!